domingo, 27 de septiembre de 2009

Moisés

Moisés tiene casi cuarenta años, él es de Ayacucho, pero ha vivido casi toda su vida en Lima, de su acento serrano ya no queda casi nada, es un tipo de pocas palabras, trabajó desde muy niño en la Parada, junto con sus hermanos, luego con este hermano, decidieron independizarse, separarse de mama y papa, se enteraron de algunas invasiones a las afueras de la capital, llegaron a parar en Montenegro, un lugar que del centro de Lima demora dos horas en llegar, a ellos no les importo mucho, ya tenían lugar donde vivir y eso era de más relevancia.

Moisés con una gran visión del futuro, decidió que debía trabajar en Montenegro las ganancias se iban en pasajes, la Parada ya no era un buen lugar de trabajo, se enteró de un mercado que estaban abriendo e inmediatamente hablo con los dirigentes, armo un puesto de abarrotes con lo que había ahorrado, a algunos años de esto, vino la municipalidad y dijeron que el terreno donde estaba ubicado el mercado, había sido destinado para un parque, todos los comerciantes a pesar de sus reclamos tuvieron que retirarse, al ver los grandes tractores que trajo la municipalidad para el desalojo.

Moisés no se quedó de brazos cruzados en una casa cerca a ese ex mercado alquilo un espacio y estableció allí su bodega, las cosas no le fueron mal, como ya tenía sus clientes, estos aun lo visitaban y le compraban cosas con regularidad.

Moisés abre su bodega muy temprano por las mañanas, y cierra muy tarde, trabaja de lunes a domingo, casi no descansa, ahora tiene cable en un pequeño televisor, que pone arriba de su bodega para que sus clientes puedan ver los partidos internacionales o documentales que tanto le gustan a Moisés.

Sin embargo luego de algún tiempo, conoció a una chica casi una niña, cajamarquina blanca y de cuerpo minúsculo pero con formas bien definidas, Moisés se sentía solo y empezó a seducir a esta chica casi niña, hasta que la hizo su mujer.

Moisés alquilo un pequeño cuarto cerca de su bodeguita, y vive ahora con esta chica casi niña, la chica casi niña va al colegio por las noches, la chica casi niña se embarazo de Moisés, la chica casi niña perdió al bebe de Moisés, la chica casi niña le dijo que no era necesario abrir todos los días, la chica casi niña le dijo que no le gustaba ver tanto sapo en la tienda, la chica casi niña hizo que Moisés moviera su televisor de tal manera que solo él y la chica casi niña vieran sus programas y nadie más.

Moisés ahora descarga ahora todas sus energías en esta chica casi niña, por las noches si uno pasa cerca a su cuartito, escucha los jadeos que hacen, no les importa mucho lo que piensen los demás, ellos gozan plenamente.

La chica casi niña, conoce a muchos chicos de su colegio, ellos le preguntan cómo es que puede vivir con ese señor que puede ser su padre, ella solo se ríe, sabe que no tiene a nadie más en el mundo, sabe que de alguna manera domina a Moisés, sabe que si él la deja tendría que regresar a la casa de sus padres, sabe que eso no le gusta, que prefiere aguantar Moisés, sabe que de algún modo se siente segura, sabe que aunque ya se está aburriendo de Moisés es preferiblemente dormir con un viejo, que le compra cosas y hace muchas cosas para hacerla feliz, que vivir en la completa miseria, sin saber si habrá algo que comer al día siguiente.

Moisés ahora prefiere dormir hasta más tarde con la chica casi niña, Moisés ahora cierra temprano su bodeguita, Moisés se siente feliz.

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